Cuando se trata de cuidar la apariencia, las mujeres pueden volverse realmente obsesivas, llevando al extremo ciertos hábitos que aunque en apariencia parecen inofensivos, con el tiempo pueden volverse perjudiciales si se abusa de ellos. ¿Estás equivocándote tú con alguno de ellos al incluirlo en tu rutina? Si quieres averiguarlo, entonces debes seguir el artículo que traemos el día de hoy para ti, en el cual te presentaremos los más comunes y como puedes mantenerlos en un límite seguro.
Técnicas de belleza potencialmente tóxicas
- La exfoliación. Eliminar células muertas siempre es bueno para la piel, sin embargo, no deberías hacerlo más de una vez a la semana ni tallar muy fuerte. Recuerda que la dermis es un órgano muy sensible y puedes terminar con enrojecimientos y heridas si no sabes exfoliarte con cuidado.
- Aclarar manchas con jugo de limón. Este es uno de los remedios más conocidos de belleza que existen, pero cuidado, porque también resulta no ser el más adecuado. El limón contiene ácidos que, de hecho, pueden incrementar tus manchas, sobre todo si te expones al sol demasiado pronto.
- Remover las cutículas de las uñas. Las manos tampoco están exentas de cualquier rutina de embellecimiento. Las cutículas ciertamente pueden ser un estorbo, pero hay que saber cuando se deben quitar y cuando no. Si las tienes muy finitas e insistes demasiado, puedes terminar hiriéndote.
- Extraer puntos negros y barritos. Sabemos que es irresistible no sacar todas esas impurezas, pero piensa bien antes de hacerlo. Busca un método seguro para librarte de ellos y de preferencia, hazlo con una lanceta y no con tus dedos o te podrías dejar cicatrices.
- Depilarte las cejas. Es muy necesario quitar los vellos de más, ¡pero no lo hagas con tanta frecuencia! La zona de los ojos es sensible y necesita descansar de las pinzas por un período de tiempo razonable.
¿Conoces algún otro hábito de belleza que en exceso pueda resultar tóxico para la apariencia o salud de las personas?
