Hechos insólitos ocurren donde sea y ni siquiera la alimentación se escapa a las situaciones más extrañas. El caso que te presentamos el día de hoy sin duda te va a dejar sorprendido. Nicholas Woodcraft es un niño de 11 años de edad de Bristol que jamás a probado un alimento sólido. Por increíble que parezca, durante prácticamente toda su vida se ha nutrido tan solo a base de licuados de plátano y Nesquik.
Su madre, Rosanne, ha afirmado que en el pasado intentó darle a probar comida de la misma manera que ocurre con los otros niños, sin lograr jamás que ingiera otra cosa que las malteadas.
A causa de este extraño hábito alimenticio, Nicholas no sabe como masticar pues todo lo que consume son líquidos. Lo más sorprendente del asunto es que hasta la fecha no se enfermado, con todo y su mala alimentación. A pesar de la peculiaridad de su dieta, su mamá se ha ocupado de que él consuma todas las calorías que necesita para seguir desarrollándose.
Actualmente, el niño consume unas 2800 calorías diarias a través de dos o tres batidos de Nesquik, que se toma en diferentes momentos de su rutina.
Según Rosanne, la afición de su hijo por el Nesquik comenzó después de los dos años de edad, pues antes de eso su dieta era más variada. Lo alimentaba con distintas comidas molidas y otros líquidos; hasta que se rehusó a tomar nada más que esta marca de licuado.
Aunque ha consultado a varios especialistas para solucionar el problema, aun no ha tenido éxito en modificar su alimentación.
Algo que Nicholas adora hacer es cocinar pasteles que otras personas se encargan de probar, pues él no come ni sus propios postres.
