A lo largo de la historia hay muchos profesionales del espionaje que han salido a relucir, una vez terminada su carrera, como los mejores a nivel internacional para ciertas tareas en específico. Esto ha hecho que muchas personas se sientan aún más curiosas respecto a las formas efectivas de volverse un espía en la vida real.
En este artículo pretendemos presentarte uno a uno alguno de los espías más famosos y galardonados en la vida real, claro, en la gran mayoría de los casos están retirados, pero aun así tienen una gran cantidad de experiencia en asuntos de espionaje y trabajos de inteligencia a nivel internacional.
Melita Norwood
Fue la asistente aparentemente “inofensiva” del director de uno de los centros de investigación atómica de Gran Bretaña, pasó fríamente los secretos de la bomba atómica a Rusia durante más o menos unos 37 años, antes de ser finalmente identificada en 1999.
Era hija de un hombre nacido en Letonia y una mujer simpatizante con los ideales comunistas, logró mucho reconocimiento en la prensa como “la espía que vino de la Co-Op” como resultado de las bolsas de compras que llevaba cuando se descubrió su verdadera lealtad a la edad de 87 años.
Virginia Hall
Una voluntaria nacida en Estados Unidos, que trabajó con el Ejecutivo de Operaciones Especiales durante la Segunda Guerra Mundial, Hall operaba en la Francia ocupada por los Nazis, y gracias a ella se coordinaron un sin número de actividades de la Resistencia en Vichy trabajando como corresponsal del New York Post y apareció en la lista de “más buscados” de la Gestapo como “la dama cojera”.
Klaus Fuchs
Se trataba de un físico nuclear alemán que se instruyó en Inglaterra en 1933, trabajó en el proyecto ultra secreto de la bomba atómica británica, cuyo nombre en código era “Tube Alloys”, y después en el Proyecto Manhattan. Fue arrestado y encarcelado en 1950 después de que quedó claro que estaba pasando información a la URSS, motivado por sentimientos antinazis y una visión complicada de cuál era la mejor manera de lograr el equilibrio de posguerra.
Ursula Kucynski
Seguro la habrás escuchado, era una comunista judía alemana, que se comprometió con la causa desde una edad temprana. En 1930, se trasladó a China, donde practicó técnicas de radio, y posteriormente vivió en Suiza e Inglaterra, antes de huir a Berlín Oriental en 1950 tras el arresto de Klaus Fuchs, uno de los espías que postulaba para la KGB.
